lunes, 23 de julio de 2007

El lugar dónde resido










Hola gent, família,




Pues hoy os quería presentar el pueblo dónde resido. Es un pueblo de los andes, rodeado absolutamente de montañas, por todas partes, impresionantes, no sé si con las fotos se podrá percibir.


Pues ya me encuentro como en casa, la verdad, mucho más relajada. Aún no nos hemos acabado de organizar, y los del municipio son bastantes desastrillos.


Pero ya empiezo a Omhear, que por cierto ya era hora. Por lo tanto, me lo tomo todo con muchísima tranquilidad. Yo me he de adaptar a ellos y no al revés. Así que ya empiezo a saludar con el saludo típico, buenas tardes, ¿como le va?, dando la mano por supuesto, aquí todo el mundo se da la mano al saludar, intercambiar unas palabras y marchar. Me gusta.


La semana pasada entre otras cosas, ayudé a hacer carteles de los cursos vacacionales, que les encantó, y aunque sólo los podíamos imprimir en blanco y negro, estaban tan contentos. Los colgamos por todo el pueblo. Todo y que los horarios al final no han resultado así, el profe de música hoy no se ha presentado, y el de pintura tampoco. Han llegado 3 chavalillos universitarios que venían a hacer las prácticas, a enseñar matemáticas a los niños, y han acabado haciendo pintura. Pero llegaron 2 horas más tarde de lo que estaba previsto empezar el curso, pero como los chavales no paraban de molestar (hey ya casi me los he ganado a todos) me los he agarrado a todos juntos, pero como son todo modositos y como muy tímidos, al final he tenido que proponer yo y han flipado porque hasta los zapatos les he hecho sacar. Ah, la profe de inglés se ve que si que se ha presentado, pero se ha marchado por un imprevisto. Y así vamos, pero los chavales son un encanto.


También he tenido varios casos muy interesantes, que haber como acaban. Y ésta tarde he empezado con una especie de taller de la autoestima, con unos chavales que vienen a Chunchi 1 semana al mes. Son de las comunidades, y normalmente trabajan en los pastos, pero mantienen la escuela de ésta forma, que por cierto las profes apenas han acabado el bachillerato. Son 30 chavales, les he dicho que me los separen en grupos de 10 por edad, y hoy he estado con los primeros. Mañana por la mañana tengo los otros dos grupos. Ha sido muy instructivo, más, bueno, si acaso eso lo explico otro día, porque tengo que observar un poco más.


Martita, me ha pedido ayuda con casos de asistencia social, yo ya le he dicho que ni idea, que es una forma muy diferente de funcionar, no te vienen a ti, tu vas a ellos, pero que yo le acompaño dónde haga falta. Y por ejemplo pasado mañana nos vamos de visita, y es que se ha denunciado (varios vecinos, o algo así) que una señora pega a sus hijos, y tenemos que investigar (trilorirala inspector gatchet, tirorirara...), no me estoy cachondeando, pero es que la investigación consiste en ir a la casa de ellos y observar y preguntar. Hemos hecho un plan, yo hablo con la madre y ella con los niños..., y a ver...
Por otra parte, me encuentro muy a gusto en mi nuevo hospedaje y en mi nuevo pueblo. En el hotelillo lo lleva la Doña Irene, que en muchas ocasiones me acompaña mientras desayuno. Doña Irene parece una madam, no por nada, sino porque ella va mandando y dirigiendo como a 8 chavalillas, que se escaquean todo lo que pueden, no paro de encontrármelas escondidas, enviando mensajitos de móvil, y cosas por el estilo. Pero es que no me estraña, comienzan a las 6 de la mañana y acaban como a las 10 de la noche, CADA DÍA. A mi ya me tratan como a una reina, y también me utilizan un poco (pero yo encantada). Ayer yo estaba planchando y Maira, me vino a acompañar, diciendo a Doña Irene, que estaba conmigo, cuando llevábamos un rato, me dice: Ahora vengo, si viene Doña Irene, le dice que estoy en el baño. Se va, y al cabo de un segundo Doña Irene entraba, y luego nos fuimos las dos para afuera, y entraba Maira de la calle, en fin, normal, cuando tenga oportunidad voy a hablar con Doña Irene (no se pierde nada por provar), porque pobres chavalillas adolescentes hormonadas, vaya locura, tenerlas allá encerradas todos los días.
Como ahora también tengo más confianza, ya les voy diciendo que me pongan un poco más de verdura y menos arroz. Es que para comer y cenar, siempre consiste en lo mismo, de primero sopa (que normalmente lleva patata, yuca, boniato, y más de lo mismo) y de segundo unos 40 gr de carne, un montón de arroz, y acompañado con un poquitititito de verdura o ensalada, y un zumo o unas hierbas aromáticas frías (para que nos podamos entender).
Pero tengo un mercado justo delante, y voy a comprar fruta, y al menos lo tomo de postre.
Ah, la iglesia que se ve, está en la plaza del pueblo, y es dónde me encuentro ubicada.
La señora es un encanto, que me he encontrado ésta tarde mientras estaba paseando y ya casi me ha adoptado.
Y mañana os explico más, que este fin de semana estuve en una hostería con aguas termales, para que veáis que me cuido, sobretodo pa que lo vea mi Madre, que tu hija pequeña también puede ser una pija rematá, sobretodo cuando sale tan bien de precio.
Un abrazote.


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